Como él ya había viajado más veces (Australia, Dinamarca), pensé que el regalo perfecto sería un diario de viajes.
Hice el diario con unos 200 folios en grupos de 5, doblados y cosidos por la mitad. La tapa es de plástico duro y flexible, que forré con goma-espuma (para que sea blandito) y luego con un papel adesivo que imita a vaqueros. Después pequé los folios y la tapa con la pistola termofusible y rematé el interior pegandole papel azul oscuro. Para finalizar añadí unos detalles como las fotos de nuestros amigos, un bolsillo interior y la portada con pintura plateada a relieve y una cenefa de papel.
Bolsillo interior Primera página
Segunda página Última página
No hay comentarios:
Publicar un comentario